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“Tenemos un enclave de la ciudad tomado por bandas narcocriminales”

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01-11-2016 | POLITICA | ANÁLISIS
“Tenemos un enclave de la ciudad tomado por bandas narcocriminales”

La jueza Alejandra Rodenas que este lunes procesó a Monchi Cantero por la muerte de una adolescente señaló que el crimen copó parte de la zona sur rosarina.

La jueza Alejandra Rodenas que este lunes procesó a Ramón Machuca, alias Monchi Cantero, por el asesinato de una adolescente de 14 años tras el ataque por encargo a una supuesto búnker de drogas en zona sur, lamentó en lo que esa parte de la ciudad se ha convertido aunque se mostró confiada en que pueda revertirse.

"Tenemos un enclave de la ciudad prácticamente tomado por bandas narcocriminales", observó la magistrada. Rodenas explicó que la muerte de Lourdes Cantero fue el resultado de un golpe premeditado y violento.

Según lo que se pudo reconstruir, Monchi encomendó el ataque en Conscripto Bernardi 6374 porque tenía información que allí funcionaba quiosco de droga que supuestamente afectaría su propia actividad en el barrio y ordenó "darle a mansalva".

"Cuando uno le dice a otro 'tirale a mansalva' está diciendo 'no me importa lo que hay atrás de ese muro' -llamó la atención la jueza- y si bien en esa casa podía haber tenido que ver con la venta de estupefacientes, la que se muere es una chica de 14 años, como han muerto tantos otros chicos de la ciudad de Rosario".

Lourdes Canteros falleció la noche del 15 de mayo de 2013 luego de que una ráfaga de disparos impactara contra su casa de Conscripto Bernardi al 6300 cuando miraba televisión con sus hermanos.

En el fallo se detallan conversaciones de Machuca con un integrante de la banda de Los Monos donde Monchi brinda directivas para que se averigûen los movimientos de un supuesto quiosco de droga que contaba con protección policial. Para Rodenas, Machuca tenía conocimiento que el lugar era una casa de familia y no un búnker, por lo que su orden "determina un accionar sin mesura o cuidado alguno".

Monchi fue procesado por homicidio calificado por promesa remuneratoria, agravado por el uso de arma de fuego y con dolo eventual.

Fuente: R3-SM

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