Desde el pasado martes, los gremios habían iniciado una medida de fuerza en reclamo de mejoras salariales.
Los gremios del sector aceitero reclamaban mejoras salariales, lo que generó tensiones en la industria. En respuesta a la huelga, las empresas presentaron una denuncia ante la Secretaría de Trabajo, dependiente del Ministerio de Capital Humano.
Este lunes por la mañana, la Secretaría de Trabajo dictó una conciliación obligatoria para resolver el conflicto. La medida, que entrará en vigencia este miércoles a las 11:00 horas en Buenos Aires, busca mediar entre las partes involucradas para alcanzar un acuerdo.
Durante el período de conciliación, que se extenderá hasta el 31 de agosto con posibilidad de prórroga, los gremios y las empresas deberán suspender cualquier acción directa, como la huelga o los despidos. Además, deberán participar en las negociaciones convocadas por la autoridad laboral.
La intervención de la Secretaría de Trabajo pretende evitar que el conflicto se prolongue y facilitar un acuerdo que satisfaga a ambas partes. La medida busca estabilizar el sector y restablecer la normalidad en la actividad aceitera.