El ministro de Seguridad de la Provincia, Claudio Brilloni, firmó la autorización que avala a la Municipalidad de Santa Fe a compactar 1.600 motos que actualmente ocupan el 50% de la capacidad del corralón público.
Se trata de los vehículos que fueron secuestrados tras el decreto provincial que facultó a la policía a retener motos cuyos dueños no puedan acreditar la propiedad del birodado.
Fernando Peverengo, secretario de Control, explicó que la Municipalidad es depositaria de estos vehículos que ocupan el 50% de la capacidad del Depósito de Vehículos Retenidos (DVR), y que por eso buscaba compactarlos.
Peverengo detalló que "ahora empieza el trámite administrativo", proceso en el cual se deberá notificar a los propietarios.
Según indicó el funcionario, los vehículos serán compactados "entre un mes y mes y medio". De esta forma, comienza una cuenta regresiva para aquellos propietarios que desean retirar la motocicleta con la documentación correspondiente.
Para ello, deberán presentar los papeles que acrediten la propiedad del vehículo y pagar el precio de estadía que ronda entre los $300 y $400 por día.
"Nosotros firmamos un convenio donde somos (por el municipio) depositarios de las motos que retenía la policía hasta que las personas regularicen su situación. Hubo cerca de 5.000 motos ingresadas retenidas por policías. Nos quedaron prácticamente 1.600 y estamos en proceso de compactación" había explicado anteriormente el funcionario.
El secretario recordó que la idea es, en un principio, alquilar un nuevo espacio cerrado para un depósito destinado a automóviles y dejar el ya existente exclusivamente para motos.
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