El dramático momento en que una embarazada da a luz en un pasillo: «Le pedí a mi marido que lo atrapara»
Las impactantes imágenes muestran cómo Jesica Hogan, una madre estadounidense de Kansas, dio a luz a su quinto hijo en el pasillo del hospital. Intentaba llegar a la habitación pero el nacimiento se produjo antes de que pudiera traspasar la puerta de la sala de partos.
La fotógrafa Tammy Karin, subió a su web la increíble historia de este nacimiento, que ocurrió el 24 de julio de 2017 en el hospital Via Christi, de Kansas.
A diferencia de otras historias, en las que la llegada tarde al hospital tiene que ver con el poco cuidado durante el embarazo, este caso fue realmente inesperado. Es que Hogan tenía contracciones regulares hacía días pero iba a la consulta y le mandaban a casa de nuevo. Así, en tres ocasiones.
Tuvo tantas falsas alarmas que temía no darse cuenta cuándo el verdadero momento llegara. "Perdí la fe en mi capacidad para darme cuenta si estaba en verdadero trabajo de parto o no", cuenta ahora que todo pasó. Hasta pensó que deberían inducir el parto… Pero a las 2 de la mañana de esa jornada para la memoria un dolor la sacudió y comenzó la aventura.
Llegamos y sentí que salía, así que me bajé los pantalones de manera instintiva en el pasillo y le pedí a a Travis que lo atrapara
Pensó que no llegaría nunca al hospital. Ya había roto bolsa y sentía que el niño iba a salir en cualquier momento. Y así fue, no bien puso un pie en el pasillo de la Clínica comenzó el parto. No llegó ni a sacarse los zapatos. Travis, su marido fue fundamental en el episodio. Calmo, la ayudó -literalmente- a parir.
"Llegamos y sentí que salía, así que me bajé los pantalones de manera instintiva en el pasillo y le pedí a a Travis que lo atrapara", cuenta con dramatismo Hogan.
El niño salió en un solo pujo, con al ayuda de su marido y de una enfermera. El pequeñito demoró unos instantes en llorar, lo que encendió las alarmas pero finalmente todo salió bien y no necesitó de cuidados especiales. Para esta madre ya experimentada, fue una experiencia muy impactante. "Fue el parto más loco que tuve, pero también fue el mejor", confesó.
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