El Papa y líderes mundiales advirtieron sobre tensión en Medio Oriente
07-12-2017 | INTERNACIONALES | A LA CASA BLANCA
El Papa y líderes mundiales advirtieron sobre tensión en Medio Oriente
El Papa Francisco, Theresa May y Vladimir Putin
Tantos países aliados como enfrentados a Estados Unidos lanzaron fuertes críticas anticipando el anuncio del presidente Donald Trump en el que reconocerá a Jerusalén como la capital de Israel.
El papa Francisco expresó su "profunda preocupación" y pidió que "todos respeten el estatus quo de la ciudad".
"Mi pensamiento va ahora hacia Jerusalén; al respecto no puedo callar mi profunda preocupación por la situación creada en los últimos días y, al mismo tiempo, dirijo un sentido llamado para que sea compromiso de todos respetar el status quo en la ciudad, en conformidad con las pertinentes resoluciones de las Naciones Unidas", amplió en la audiencia general, invitando a la "sabiduría y prudencia, para evitar agregar nuevos elementos de tensión en un panorama mundial ya convulsionado y signado por tantos y tan crueles conflictos".
Por su parte, la premier británica, Theresa May, dijo en la Cámara de los Comunes que la postura de su país sobre Jerusalén no cambia y el estado de la ciudad puede ser definido solo "a través de un acuerdo negociado entre israelíes y palestinos".
"En último análisis debe convertirse en capital compartida del Estado de Israel y de un Estado palestino", agregó. May subrayó que Trump no habló con ella sobre la decisión.
China, que tiene buenas relaciones con Israel y los palestinos, expresó su inquietud por un "posible agravamiento de las tensiones regionales", mientras que el gobierno ruso de Vladimir Putin, un actor crucial en el Medio Oriente, habló de un "posible deterioro".
El gobierno israelí recibió alborozado la noticia, en tanto las autoridades palestinas declararon "terminado" el proceso de paz.
Turquía anunció que será sede de una reunión de naciones islámicas la semana próxima para dar una oportunidad a sus gobiernos de coordinar una respuesta. La Liga Árabe convocó a una reunión de emergencia el sábado.
La áspera reacción global puso en entredicho la factibilidad de un plan de paz que la Casa Blanca está elaborando y piensa presentar en un futuro próximo.
Los palestinos quieren Jerusalén oriental para la capital de su futuro estado independiente y temen que la declaración de Trump les imponga una solución desastrosa a uno de los problemas centrales del conflicto palestino-israelí.
"No puede haber conversaciones con los estadounidenses. El proceso de paz está terminado. Se han adelantado al desenlace", dijo el funcionario palestino Hanan Ashrawi. "No pueden dar por sentado que aceptaremos". La autoridad palestina se reunirá en las próximas horas para planear los próximos pasos.
Funcionarios estadounidenses dijeron el martes por la noche que Trump reconocerá a Jerusalén como la capital de Israel a pesar de la vehemente oposición árabe, musulmana y europea a una medida que trastrocaría décadas de política exterior estadounidense y podría provocar reacciones violentas.
El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu dijo en Facebook que "nuestra identidad nacional histórica recibe expresiones importantes todos los días".
Fuente: SM – Ámbito Financiero