En 2015, Pablo Cejas denunciaba en Sin Mordaza la connivencia policial con el narcotráfico
18-07-2017 | POLICIALES | SIN MORDAZA
En 2015, Pablo Cejas denunciaba en Sin Mordaza la connivencia policial con el narcotráfico
Pablo Cejas fue atacado a balazos el 6 de junio de 2015, tras sostener una fuerte discusión con su superior. El policía dialogó en ese momento con Sin Mordaza TV y aseguraba que ya no sentía miedo por sí mismo sino por su familia.
"La mañana del 6 de junio me iba a tomar servicio al comando radioeléctrico de la ciudad de Recreo, y en la intersección de la Ruta 5 y un camino rural sufro un desperfecto mecánico en mi moto. Descendí de la moto, saqué el saca bujías del baúl, me saqué el bolso y en ese momento -todavía estaba oscuro- veo que vienen dos masculinos en una moto. Primero pensé que eran changarines porque es zona de quintas de cultivo, y no le presté mayor atención, pero cuando levanto nuevamente la vista veo que uno ya tenía un arma de fuego en la mano. Yo estaba bien identificado como personal policial. Estábamos ya a una distancia de 6 o 7 metros donde se produce un enfrentamiento armado, con los dos masculinos, los dos tenían armas de fuego. Yo recibo un impacto que ahora se cotejó, de un calibre grueso en el lado de las costillas que lo frenó el chaleco balístico, y lo cual me hace perder un poco la estabilidad, yo seguí reprimiendo la agresión, caigo al piso ya sin aire y escucho las palabras "matalo al cobani". Me quieren ejecutar en el piso y el disparo entra por la nuca, yo tenía el casco de motociclista puesto que desvió el proyectil.
No sé si alguno recibió algún disparo. Con el último disparo escuché el grito de uno que decía que le di, pero después perdí de vista y yo prácticamente caí desvanecido porque ya tenía dos impactos en el cuerpo.
Nunca presté atención a si alguien venía atrás, porque es una ruta que une dos rutas principales. Hay mucho tránsito. Yo fui a trabajar tranquilo uniformado, iba a prestar servicio 24 hs, la verdad que me sorprendió la forma que procedieron". Comenzó relatando Pablo Cejas.
Consultado sobre los hechos que derivaron en su traslado a Recreo, Cejas explicó: "Yo estaba prestando servicio en la brigada motorizada, soy instructor motorista con 6 años de antigüedad en la brigada y 11 años en la fuerza policial. Tuvimos una fuerte discusión con jefes, por algunos temas que asuntos internos ya está tomando intervención. Al no querer yo ceder a sus requerimientos, discutí, y en cuestión de horas tenía el pase a la ciudad de Recreo. Me fui a trabajar igual, presté servicio dos guardias en ese lugar y para la tercera guardia me sucede esto. Llama mucho la atención porque en ningún momento me quisieron robar, simplemente detuvieron la moto y me empezaron a disparar".
Sobre la posibilidad de que exista una conexión entre el hecho y la connivencia con el narcotráfico de algunos sectores de la policía, Cejas dijo: "Puede tener mucha conexión entre la connivencia de algunos sectores de la policía, no toda porque yo tengo compañeros verdaderos que están conmigo en la calle, pero hay otro sector que todos conocen pero muy pocos se animan a hablar, que sí tienen connivencia con el narcotráfico y todo lo que deja, porque hay personal policial que en tiempo record levantaron casas, autos de alta gama, viajan al exterior, llama la atención. La mayoría del personal está condicionado, con amenazas. Imaginate a mí que por discutir me pasó esto, si hubiese denunciado con nombre y apellido. Calculá que sacaron a un jefe de provincia esposado del despacho y en este momento tenemos acá en la ciudad cinco policías detenidos por el tema de la connivencia con droga. El último policía que cayó vendía droga directamente. Hay lugares puntuales que no se pueden tocar, no se puede ni siquiera arrimar uno porque te sacan del lugar".
"El jefe de policía no tiene intervención vía radial. Es muy raro que esté, no anda comunicando esas cosas, pero sí te dan a entender algunos oficiales o superiores de servicio, o por mensajes de texto más que nada, -porque hoy en día queda todo registrado mediante el sistema nuevo del 911 y casi todo nos mantenemos vía WhatsApp o SMS- y cuando saben que nosotros estamos metiendo en ciertos lugares donde no conviene que anden mucho los móviles nos dan la orden de salir de ahí o directamente nos dicen que no vayamos ahí". Aseguró
Con respecto a la reacción de su familia ante esta situación, Cejas aseguró: "En esta situación puntual muy mal porque yo ya fui herido tres veces en acto de servicio en distintos procedimientos. Gracias a Dios siempre salí medianamente airoso, pero siempre fue contra los delincuentes. Esta vez al estar la firme sospecha de que fue la policía misma, ya mi familia tiene otra clase de preocupación porque son muchos, saben dónde vivo, cómo me muevo.
No tengo miedo por mí, estoy como acostumbrado. El tema es mi familia. Que se metan conmigo todo bien, puedo llegar a aguantar, pero ya ahora está en riesgo la vida de mi familia, de mi esposa mis hijos, voy a ser abuelo el mes que viene. Vivo encerrado en mi casa ahora con una custodia mínima policial en la puerta. Mi hijo de siete años que va a segundo grado, los maestros ya saben que lo retiro yo o la mama. No es una vida sana tampoco la que estoy llevando".
En cuanto a la situación actual de la causa, aclaró: "El primer día la quisieron caratular como tentativa de robo. Pero nunca me pidieron nada, fueron entre 22 y 23 disparos. Fue un enfrentamiento bastante ruidoso. Y ahora se pudo cotejar que hubo tres armas involucradas, la mía que es provista por la provincia y otra pistola aparentemente 9 mm y se encontraron capsulas también de calibre 22 servidas. Los peritajes se hicieron adelante mío con fotografía, se empezaron a hacer las cosas como corresponde con la cadena de custodia como dice la ley, muy transparente no hubo margen de error ni de duda, fue el personal de Asuntos Internos con muy buena predisposición y me iban explicando los pasos a seguir. Así que ahora no tengo dudas de las cosas que están haciendo. Ahora tengo que confiar".
Fuente: Sin Mordaza