Luego de acumular 84 días sin colectivos en Rosario, los choferes realizaron una nutrida manifestación desde la sede local de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), para luego pasar por la Municipalidad hasta llegar a Gobernación en Santa Fe al 1900.
“Javkin tiene ahora la potestad para resolver este conflicto, que la utilice”, aseguró el referente del gremio, Sergio Copello, exigiéndole al intendente que intervenga tras declararse la emergencia en el transporte.
Desde mayo, los colectiveros mantienen un reclamo a fuerza de huelgas. En los últimos seis meses realizaron siete paros, cada uno de ellos por el mismo motivo: el retraso en el pago de salarios vinculado a su vez, a la demora del envío de los subsidios nacionales.
El arribo de los fondos aún no se acreditaron en las cuentas, por tal motivo los trabajadores volvieron al corte de crédito laboral, ante lo que podría ser un fin de año por demás conflictivo.
“Que hagan los esfuerzos necesarios los empresarios, la Municipalidad, Provincia, y que en los primeros días del mes nos paguen el salario y con eso garanticemos el servicio. Los empresarios, con la recaudación que tienen no manifiestan una voluntad de contribuir con los trabajadores”, sostuvo Copello.