Negocios gastronómicos históricos que no llegaron al segundo semestre

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13-07-2016 | EMPRESARIAS | ROSARIO
Negocios gastronómicos históricos que no llegaron al segundo semestre

Un combo de menor consumo, tarifas más altas y el valor de los alquileres, se llevó puesto a clásicos comercios de la ciudad.

Foto ilustrativa

Cuando los referentes de la gastronomía rosarina intentan un análisis del momento económico actual hacen referencia a un fuerte bajón en la demanda que empezó hace dos años pero que desde comienzos de este 2016 se empezó a sentir con más fuerza. A eso se le suman los tarifazos y el valor de los alquileres, un combo que se le hizo difícil de sostener hasta a clásicos del sector que no lograron hacerle frente y debieron bajar las persianas.

Después de Semana Santa, un bodegón con casi 50 años de historia como Capri, cerró sus puertas y hoy su clásico local de la esquina de Rodriguez y San Luis tiene cartel de "se vende o se alquila". A la hora de buscar las razones, algunos exponentes del sector esbozaron que el hecho de haberle "quitado historia" transformándolo en un lugar más gourmet les terminó jugando en contra.

Otro que no resistió los embates fue Bao Baps, el histórico bar de Avenida Pellegrini al 1200 que hace algunos años había intentado un refresh adaptándose a las nuevas tendencias y dejando de lado su perfil de confitería para incorporar las tapas y la cerveza artesanal. De hecho hasta el nombre había modificado pasando a llamarse El Duende Bao Baps. En los últimos días se estuvieron viendo movimientos en el lugar que hacen suponer que otro negocio se instalará en ese inmueble.

Concentrarse en un estilo de cocina determinado distingue a algunos comercios gastronómicos de otros y se convierte muchas veces en una marca registrada. Para comer pescados o mariscos La Chernia, El Chucho y La Cholga era un referente en la ciudad. Pero hace unos dos meses la esquina de Mendoza y Juan Manuel de Rosas muestra una postal de ventanas cerradas.

La cadena de pizzerías y lomitos cordobesa Junior B también cerró las puertas de su local sobre Avenida Pellegrini. Se trata de una movida que se sale de la agenda general de esta compañía que el pasado 9 de julio acaba de inaugurar una franquicia en Tucumán y anunció una fuerte expansión en todo el país. "La intención es continuar con el objetivo concreto de convertir a Junior B en una marca nacional, llegando a 2021 a contar con cien nuevas franquicias", comunicaron.

Passami L´Olio en San Luis y Laprida, Mexicas a la altura del 1300, y Bien de Aca y la parrilla El Catedral al 1300, todos de Pellegrini, también dijeron basta en los últimos meses.

punto biz

Fuente: SM

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