Prisión preventiva para el ladrón de la escuela
21-09-2016 | JUDICIALES | SANTA FE
Prisión preventiva para el ladrón de la escuela
El juez Sergio Carraro consideró acreditados los tres hechos atribuidos al joven, que fue detenido la semana pasada sobre los techos de la escuela Simón Bolívar.
Un joven de 19 años quedó detenido con prisión preventiva por un robo agravado por el uso de arma y por dos tentativas de robo. Así lo resolvió ayer el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Sergio Carraro a solicitud del fiscal Estanislao Giavedoni.
El fiscal había imputado al detenido por robo calificado por el empleo de arma ocurrido a una maestra embarazada de siete meses de la escuela Simon Bolívar Nº 1.258 del barrio Fonavi San Jerónimo de la ciudad de Santa Fe. La docente sufrió el robo de su celular mientras daba clase de Plástica a niños de entre 6 y 7 años.
Por otra parte, el fiscal le atribuyó a JEB dos tentativas de robo ocurridas el martes 15 de marzo y el jueves 8 de septiembre.
Robo a la maestra
"La investigación comenzó el jueves 8 de septiembre a raíz del robo que sufrió la maestra de la escuela Bolívar. Una semana después, se pudo aprehender a un joven que estaba en el techo de la misma escuela, lo que generó la sospecha –por sus características físicas– que podía ser la misma persona que había robado a la docente", detalló Giavedoni. En tal sentido, añadió que "luego fue reconocido por la víctima en una ronda de reconocimiento de personas, lo que permitió su detención y el pedido de prisión preventiva", añadió el fiscal.
Por otra parte, Giavedoni agregó que "el juez tuvo en cuenta la calificante del robo de celular que le imputados al detenido. Para ello consideró lo informado por la maestra: que sintió que la persona que le robaba el celular le hacía presión con un objeto en el cuello, y además dijo que si bien no vio el arma, cuando el detenido se retiraba del aula le decía que la iba a 'reventar'". El fiscal sostuvo que "estos dos elementos fueron indicios suficientes para que el juez tuviera por acreditada la existencia de un arma al momento del robo, ya que, cualquier elemento utilizado –incluso como arma impropia– sirvió en el caso para lograr el cometido que fue robar mejorando su posición dominante del hecho".
Fuente: Sin Mordaza