Seguramente, no la debe haber molestado tanto la operación en cuestión como que se haya utilizado un término erróneo y poco glamoroso para definir lo que afectaba a su pie derecho.
Por eso, Susana Giménez apeló a su cuenta de Twitter para explicar que la intervención por la que debió pasar en el Sanatorio Otamendi no había obedecido a un "juanete", como había circulado en algunos medios, sino a lo que se conoce popularmente como "ojo de gallo".
"Hola, llegué a mi casa con mis perros, estoy feliz, el dedo del pie mejorando, en dos días puedo calzarme. Les mando foto, para los mal intencionados no es juanete, era solo un ojo de gallo (con emojis de los ojos y el gallo alusivos), besos a todos", escribió la diva, junto a una imagen donde se puede apreciar el pie de la conductora reposando en su cama.
Vale aclarar que quien operó a Susana fue el doctor Alejandro Druetto, y que, como ella mismo lo explicó, se trató de una rescisión de una lesión en la piel llamada "heloma interdigital", más conocida como "ojo de gallo".
Una diferencia acaso semántica pero que Susana -quien en 2017 cumplió 30 años con su histórico ciclo televisivo- no quiso dejar pasar de cara a su merecido descanso, tras terminar su programa el pasado 17 de diciembre con un gran show en el Teatro Gran Rex.
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